Apartamentos     

Centro Cultural Eléctrico de Mathieu Leanner en París

El famoso diseñador francés Mathieu Leanner cree que el tiempo no es más que un accesorio que se puede cambiar tantas veces como se desee y con el máximo placer para uno mismo.

Con estilo kitsch puede inventar un espacio de diseño fundamentalmente nuevo para cada hora, día, mes o año. A la luz de todos estos pensamientos, Mathieu Leanner creó en la capital francesa el innovador Centro Cultural Eléctrico, un espacio para bailes, conciertos y todo tipo de proyectos artísticos.

Mathieu Leanner asegura: “Si a Alicia del cuento de hadas Alicia en el país de las maravillas le encantara una dirección de música como Rock, entonces pasaría la mayor parte de su tiempo libre en esta sala”. Si entiendes la opinión del diseñador Mathieu Leanner, entonces el aspecto más importante en su proyecto es multicomponente, ya que se basa en una gran cantidad de elementos diferentes, incluidos el sonido, la luz, la temperatura y en un diseño ideal, todo estos componentes se pueden ajustar a su manera, como lo demostró en la práctica el diseñador francés Mathieu Leanner en su proyecto Electronic.

Esta hermosa creación está ubicada en el centro de París, su área es de 1000 metros cuadrados. m., equipado con paneles insonorizados, hay enormes ventanas panorámicas en toda la pared. El proyecto Electric es simplemente increíble con su increíble vista de la Torre Eiffel, y los gráficos dentro de la habitación simplemente hielan la sangre en las venas, todo es tan hermoso y refinado.

El salón de reuniones es una característica habitual del Electric Center. Hay varios muebles, suaves sofás que se dejan llevar por la noche, después de lo cual la sala central se convierte en una sala de conciertos y, más cerca del amanecer, en una discoteca. El proyecto está equipado con una gran cantidad de dispositivos ingeniosos, gracias a los cuales, después de un período de tiempo mínimo, todo el proyecto puede transformarse en un diseño individual.

Por la noche, puede organizar un fin del mundo acompañado de hermosa música, que sorprenderá gratamente a los visitantes. Del lado de las ventanas panorámicas hay un podio escalonado para músicos, y al otro lado de la sala hay una barra de bar, que parece estar hecha sobre la base de una especie de ébano.


Interior

Paisaje