La arquitectura española muy a menudo impresiona por su audacia, formas inusuales, inspiradas en las creaciones de los expresionistas, el sutil entrecruzamiento de la cultura europea y oriental, e incluso motivos africanos. La original fusión arquitectónica mediterránea, por supuesto, nació en el caldero de culturas y tradiciones, multiplicada por el temperamento español: caliente, como el sol de España y suave, como la brisa del mar.
Las líneas de las fachadas de la casa, las ventanas, el diseño del paisaje del sitio y otros edificios se inspiraron en los expresionistas italianos Moretti y Michelucci, y las formas orgánicas que fluyen recuerdan mucho al Goetheanum de Rudolf Steiner. En última instancia, un proyecto sorprendente es una especie de diálogo entre la historia, la arquitectura y los paisajes naturales.
¿Qué nos inspiró?
Por supuesto, es imposible destacar una cosa: todo es impresionante. Formas de la casa principal, albercas, terrazas, lujosas vistas, riqueza y diversidad de la naturaleza. Durante la construcción de la casa, se utilizaron materiales naturales: piedra, metal, persianas de bambú y madera.
El solar en el que se ubica la casa es accidentado, con pendientes, pero todas las edificaciones están tan orgánicamente integradas en el paisaje natural que prácticamente se funden con la naturaleza de la costa. Los espacios interiores y el mobiliario de diseño apoyan la idea de espacios fluidos, formas redondeadas y relajación total.
El único lugar de la casa que tiene un estilo moderno es la cocina. Las superficies brillantes de acero se combinan perfectamente con las fachadas de la cocina, y cualquier chef profesional puede envidiar el contenido técnico de la cocina.
El lugar central del salón lo ocupa una zona blanda y una lujosa mesa de centro de diseño. La mesa de centro es más bien una composición escultórica sobre una base redonda.
Como en toda casa situada en la costa, se prestó gran atención a las zonas exteriores de recreo y su comunicación con el interior. En esta casa, la organización de áreas de recreación, muebles y vistas: todo es digno de las calificaciones y emociones más entusiastas.
Por alguna razón, los arquitectos y diseñadores guardaron silencio sobre una característica más de esta casa: cada detalle no solo tiene una función estética, sino también racional. Este proyecto es un ejemplo de cómo la belleza puede ser práctica y conveniente para la vida cotidiana.